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Diario de viaje de Israel
En Números 33-34, vemos que Jesús tiene un nuevo cuaderno de viaje para la iglesia.
¿Qué está pasando?
El capítulo 33 comienza con un cuaderno de viaje. Describe el viaje de Israel desde la esclavitud en Egipto, a través del desierto y hasta la orilla del Jordán, donde están a punto de entrar en la Tierra Prometida (33:1).
El recuento de los viajes de Israel demuestra que Dios es fiel para llevar a su pueblo a donde prometió, sin importar lo que se interponga en el camino. Prometió sacarlos de Egipto y llevarlos a la Tierra Prometida, ¡y lo ha hecho!
Después del cuaderno de viaje, Dios da tres series de instrucciones. Todas tienen que ver con la inminente entrada de Israel en la tierra. Les dice que expulsen a los habitantes, traza los límites de la nación y establece líderes que ayudarán a repartir el territorio para cada tribu.
Si Israel no expulsa a los habitantes, Dios dice que los nativos se convertirán en púas en sus ojos y espinas en sus costados (33:52). No solo eso, sino que Dios mismo dice que tratará a Israel como se supone que deben tratar a los habitantes si no los expulsan.
Sin embargo, como aprendemos en el resto de la Biblia, Israel no obedeció a Dios en este mismo punto. No expulsaron por completo a los habitantes (Sal 106:34). Por lo tanto, los dos conjuntos de instrucciones siguientes también se rompen. No ocupan toda la tierra (Josué 13:1) y, en lugar de dividirla en partes iguales, la acaparan los ricos en beneficio de los pobres (Amós 1:13).
En última instancia, la advertencia de Dios se hace realidad. Los israelitas serán expulsados de la tierra. No serán los destinatarios finales de la Tierra Prometida.
Esto se debe a que la promesa completa y final era para algo en el futuro. Algo mejor que una parcela de tierra (Heb 11:10).
¿Dónde está el Evangelio?
Jesús nos dio una idea de lo que sería esta promesa en algunas de sus últimas palabras en la tierra. En lugar de decirle a la gente de fuera de Israel que la aceptara, le dice a la gente de Israel que se vaya (Hechos 1:8). Les dice a sus discípulos que vayan a Jerusalén, Judea, Samaria y los confines de la tierra con las buenas nuevas de lo que ha hecho. Ese es el cuaderno de viaje de la iglesia.
En lugar de tomar un lugar geográfico por la fuerza, Jesús está guiando a su pueblo a todas partes para llegar a cada lugar geográfico con gracia (Mateo 28:19).
Y el punto culminante de este nuevo y mejor cuaderno de viaje será el día en que Jesús regrese y literalmente llene la tierra con su gloria, recree todas las cosas y traiga el cielo a la tierra para que habite con nosotros para siempre (Ezequiel 37:27).
En esa tierra, no habrá ninguna línea fronteriza que no pueda conquistar. No habrá ni un ápice de maldad que no expulse ni un ápice de equidad y justicia que no defienda. Esa es nuestra nueva y mejor Tierra Prometida. Y estamos a orillas de un Jordán metafórico, esperando entrar. La promesa de Dios es segura. Es fiel. Completará este viaje.
Compruébelo usted mismo
Rezo para que el Espíritu Santo les dé ojos para ver al Dios que guía fielmente a su pueblo. Y que vean a Jesús como quien nos envía a cubrir el mundo con su gloria y que regresará para hacerlo de manera plena y definitiva.